24/11/09

¿Hacia dónde va el tango de Rosario?


El tango es un género musical que ha superado el centenar de años de vida. A lo largo de ese siglo ha ido experimentando distintos cambios que lo han hecho pasar de la clandestinidad de sus orígenes hasta, en la actualidad, convertirse en ícono cultural del país. Muchos fueron los nombres ilustres que dejaron su marca en el tango, desde Arolas, Gardel y Canaro, pasando por Troilo, Pugliese y Salgán, hasta Piazzolla, Mederos, Goyeneche y Di Sarli. Todos ellos fueron marcando escuela y ganando admiradores de sus estilos, al punto de lograr en el público tanguero un fanatismo similar al que siente un hincha de fútbol por el club de sus amores.
Desde fines de los noventa, y luego de un largo ostracismo, se está viviendo un renacer, una refundación del tango. El 2001 fue un año de inflexión para muchos aspectos de la vida de los argentinos y también lo fue para la música ciudadana. En aquellas época de pico de crisis (aclaremos que Argentina vive permanentemente en crisis, pero a veces tiene momentos más encumbrados), ciertos valores se fueron recuperando y allí volvió a aparecer el tango como una fuerte marca de la identidad rioplatense. En Rosario, muchas de aquellas asambleas barriales con el tiempo se fueron convirtiendo en milongas y en espacios donde poder aprender a bailar tango.
Pero este resurgir de la música ciudadana en nuestra ciudad, ¿fue acompañado por nuevas expresiones en el tango o simplemente se están repitiendo las viejas fórmulas de probado éxito?


Históricamente el tango ha sido reacio a los grandes cambios en su forma de concebirlo. Paradigmático es el ejemplo de Ástor Piazzolla que toda su vida fue desacreditado por ciertos “fundamentalistas” que veían en él a un enviado del mismísimo demonio cuyo objetivo en la tierra era acabar con el tango.


En este aspecto Rosario es una ciudad conservadora. La innovación de sonidos y formas de concebir el género llegan desde Buenos Aires, con experiencias como las de La Chicana o la Orquesta Típica Fernández Fierro, que proponen algo diferente desde la estética y la composición. Rompen con el estándar del compadrito y el peinado con gomina para mostrarse de una forma más auténtica y propia del momento histórico que estamos atravesando.
Conjuntos como La Chicana y la Fernández Fierro son bien vistos por el público rosarino y las veces que se han presentado en la ciudad han llenado unas cuantas butacas de los teatros en los que se han presentado. Pero pareciera que éste entusiasmo que la gente pone en estos grupos no motiva a los conjuntos rosarinos a plantear algo distinto desde lo musical y se termina siempre cayendo en formatos más tradicionales o clásicos. Por momentos con sonidos complejos que convierten al tango en un género de elite alejado de sus orígenes populares. Como dice Ricardo Schoua, Director del boletín digital Tango y Cultura Popular, los músicos terminan tocando para músicos.
Por un lado, podemos decir que los músicos de nuestra ciudad no se la juegan por experimentar en la búsqueda de nuevas formas dentro del tango, pero es cierto también que en Rosario escasean los espacios donde los músicos puedan desarrollarse en esas búsquedas, e inexorablemente, llegado el momento, deben partir hacia Buenos Aires para continuar con su crecimiento.


Desde hace algunos años el rosarino Pablo Bernaba es bandoneonista de la Orquesta Típica Imperial con la cual participó en varias giras por el exterior. La posibilidad de estudiar con el maestro Rodolfo Mederos lo hizo dejar Rosario sin siquiera haber integrado de manera prolongada un grupo local.


El jovencísimo Franco Luciani es un excelente ejecutante de la armónica (lo llaman el heredero del gran Hugo Díaz) y también debió partir prematuramente a la Capital para poder desarrollarse como músico y llegar a tocar con León Gieco y Pedro Aznar, entre otros.
Ahora bien, en caso de que existan músicos que plantean algo diferente desde el tango, seguramente se encontrarán con la dificultad de poder encontrar lugares donde poder difundir sus creaciones. Los espacios radiales, en su mayoría, son muy conservadores y dejan de lado todos aquellos sonidos que estén “sucios” con otros géneros y que le quiten pureza al “verdadero tango”. Fusiones del tango con la electrónica como las que realizan los rosarinos de San Telmo Lounge son ninguneadas por los clásicos locutores de FM que se sienten dueños del tango.


De todas maneras existen algunos lugares físicos como Mano a Mano o algunas pocas veces la Casa del Tango donde se deja lugar a los jóvenes músicos para que muestren lo que están explorando.
Viendo el panorama actual parecería que no quedara otra que resignarse a ser una ciudad productora de materia prima. Donde los músicos adquieren una gran formación y frente a la imposibilidad de desarrollarse profesionalmente optan por crecer en Buenos Aires. Ahora sí, cuando logran el “éxito” nos golpearemos el pecho con orgullo porque “son nuestros”.


Para que esto tome otro camino se tiene que dar un cambio de actitud en los distintos actores que juegan dentro de los que es el tango en la ciudad. Músicos, difusores y productores de espectáculos deberán dejar de cuidar su quintita y proyectar decisiones en común que ayuden a un mayor desarrollo del género. Promoviendo la búsqueda de cambios que le den al tango otra frescura y nuevos aires para que siga respirando.

Fabio Rodríguez y los espacios de difusión del tango en Rosario

Ricardo Schoua y los músicos que tocan para músicos

Fabio Rodríguez y las nuevas expresiones del tango en Rosario

Ricardo Schoua y las nuevas expresiones del tango en Rosario

Fabio Rodriguez y la refundación del tango en Rosario

23/11/09

Ricardo Schoua y Fabio Rodríguez hablan sobre las nuevas expresiones del tango rosarino



Dos difusores de la música ciudadana en Rosario debaten sobre si en este resurgir tanguero existen nuevas expresiones en el tango de la ciudad o si siempre se repite lo mismo.

Sin dudas que Buenos Aires es la capital nacional y mundial del tango. Pero Rosario también es un polo importante del género en nuestro país. Música propiamente rioplatense concebida a orillas del río y en el empedrado de los puertos, en la era de la revolución tecnológica vuelve a cobrar vigencia.

El tango está otra vez de moda y es un éxito turístico en Capital Federal. Los músicos de nuestro país cotizan alto a nivel internacional y pasan buena parte del año de gira por el extranjero llevando a oídos extraños los sonidos del Río de la Plata. Rosario, aunque muy lejos de Capital, también es un punto importante del género en nuestro país y un semillero de grandes músicos. Pero en este renacer del tango en la ciudad, ¿hay algo nuevo dando vueltas o es siempre la misma melodía?

Ricardo Schoua es Director de la publicación electrónica, mensual y gratuita Tango y Cultura Popular, que tiene más de 20.000 suscriptos en todo el mundo, y también musicaliza milongas. Por su parte, Fabio Rodríguez conduce el programa “Asunto Tango” que se difunde por Cablehogar los sábados a las 20 horas y de lunes a viernes a las 19 comanda “Punto de Encuentro” por Radio Universidad.

Consultados sobre si existen nuevas expresiones en Rosario Schoua resaltó las figuras de Leonel Capitano y Joel Tortul como lo más destacado de las nuevas generaciones, mientras que Rodríguez advirtió que un gran porcentaje de los músicos que participan de las nuevas expresiones del tango no son propios de este género.





El conductor de “Asunto Tango” remarcó que el resurgir del tango en la ciudad data de mediados de los noventa.



Ricardo Schoua destacó que hay otros intérpretes menos conocidos que están en la búsqueda de nuevos sonidos pero que por momentos los músicos tocan para músicos y hacen composiciones muy rebuscadas que van alejando a la gente del tango.



En este resurgir del tango mucho tuvo que ver el baile, si las composiciones se van alejando de la gente porque no son tan bailables, ¿puede ser que el tango vuelva a entrar en una zona oscura?

RS: Claro, porque quedaría para un público de elite y en realidad no es así. Aníbal Troilo, a la hora de componer, tenía mucho cuidado en que sus temas fueran bailables, aunque también tenía de los otros, y buscaba que en esos tangos bailables los arreglos fueran sencillos.

FR: La milonga fue otro de los motores que impulsó este revival del tango. En Rosario hay milongas por doquier, en todos los barrios. Esto se ha convertido en algo impensado para aquellos que difundíamos el tango en los ’80, cuando todo era muy Air Supply.

¿Hay espacios para difundir estas nuevas expresiones?

RS: Las posibilidades de tocar en vivo en Rosario están mucho menos desarrollada que en Buenos Aires. Son espacios reducidos. En Mano a Mano cada tanto se hacen espectáculos de tango y en algunas milongas meten algo de música en vivo, pero el tema es llegar a más gente que los parientes y los tangueros.

En las milongas rondarán unas 400 personas que son más o menos las mismas que van a los diferentes bailes, pero recuerdo que una vez vino el Quinteto Real y hubo unas 5000 personas. A lo que voy es que hay un público, pero a veces se lo desalienta, los propios tangueros desalientan, los modernos y los otros.


¿Hay innovación por parte de los letristas rosarinos a la hora de componer un tango, o se siguen respetando ciertos lineamientos tradicionales?

RS: Más allá de lo que hace Leonel Capitano, no conozca otra cosa y tampoco veo que haya una gran búsqueda en lo musical. Sí me parece que se está tocando de una manera más de cámara. Hace poco fui a ver al Cuarteto Contratiempo que tocaba junto con Verónica Marchetti, una de nuestras grandes voces, y el público, que no era propio del tango, aplaudía las milongas y la Cumparsita y era indiferente ante los temas de Piazzolla o tangos más modernos. Algo similar me pasó hace un tiempo cuando fui a ver a un trío excepcional de guitarra que se llama Escolaso, aquella primera vez que los vi arrancaron tocando la Suite Troileana de Piazzolla que por ahí no es lo más adecuado para un público poco habituado al tango.

En Buenos Aires se ven a las orquestas tocar en la calle Defensa en el barrio de San Telmo, ¿se podría hacer algo similar en Rosario, con los músicos en la peatonal, por ejemplo?

RS: Yo no sé si es la Municipalidad que no los deja o son ellos mismos que no se animan. Deberían hacer ese esfuerzo y aprovechar que Rosario está posicionada como una ciudad turística para mostrarse. Creo que Rosario podría ser un polo de atracción pero para eso hay que moverse y dejar de lado las mezquindades. En la gente del tango de Rosario hay cada vez más divisiones y cierto achatamiento, como una mediocridad general que no permite unir esfuerzos para lograr un cambio. Por eso mis esperanzas no están posadas en los tangueros tradicionales.

El éxito que genera el tango, también trae consigo muchos oportunistas…

FR: -Siempre se habla de una moda de esto, moda de lo otro, y lo clásico nunca pierde la moda. Y después de una moda viene una liquidación y el tango no entró en liquidación. Lo que entra en liquidación es el oportunismo dentro del tango.